¿Sirven las tecnologías antiradiaciones?


Pulseras y colgantes, filtros, ionizadores artificiales y lámparas de sal. ¿Son eficaces para protegernos? Sumario de productos en boga.

LAMPARAS_DE_SAL
Lámparas de sal: una protección antiradiaciones con un agregado estético.

 

Existen en el mercado diferentes productos que se proponen como protección contra los campos electromagnéticos, productos bio-protectivos para radiaciones específicas y vitalizadores energéticos. En la mayor parte de los casos es difícil demostrar si estos productos funcionan o no.

A continuación, un sumario de algunos productos en boga en la actualidad:

Filtros de Graham Stetzer: Son dispositivos que eliminan o reducen los contaminantes de alta frecuencia que hay en el cableado eléctrico de hogares, colegios o negocios. Están enfocados a reducir o la “electricidad sucia”, un tipo de energía generado por el cableado y los electrodomésticos enchufados a la red eléctrica. Son frecuencias elevadas (entre 4 y 100 Khz) que dañan el organismo. Los filtros STETZERIZER son una marca registrada de este tipo de filtros, y vienen acompañados de un medidor que permite corroborar el nivel de frecuencias en el ambiente. Son de fácil instalación: simplemente se enchufan en los tomacorrientes comunes y de esa manera actúan sobre la red.

Pulseras y colgantes Q-Link: Según informan en su web, los productos Q-Link fortalecen y equilibran nuestro sistema energético aumentando nuestras defensas contra todo tipo de estrés y protegen contra los efectos de la radiación electromagnética. Disponen de colgantes y pulseras.

Q-link USB Nimbus: Según informan en su web, el Nimbus genera físicamente un campo de resonancia SRT, que consiste en una zona activa en forma de esfera de 2 metros de diámetro en la cual se reducen los efectos negativos de los campos electromagnéticos. Se enchufa en cualquier puerto USB del ordenador (PC o MAC) y crea instantáneamente un espacio protegido. Es un complemento a la pulsera o al colgante Q-link.

Geomack Energetic Vitalisers: Geomack es una empresa inglesa que lleva 18 años desarrollando productos para reducir el estrés electromagnético y la carga geopática. Tienen unidades para proteger toda la casa (el modelo E4001 cubre hasta 100m2 y el modelo E9001 hasta 200m2) y el G-Oyster, que es un protector personal y a la vez un vitalizador energético.

Green 8: Gama de productos de la empresa Bauer Biotec que producen un campo que neutraliza la frecuencia concreta para la que cada producto ha sido diseñado. Hay 3 tipos: para el teléfono móvil o inalámbrico (Green 8 Small), para aparatos electrónicos (Green 8 Medium) y el Green 8 Large, para áreas de alta concentración de aparatos eléctricos.

Ionizadores: Son aparatos eléctricos o lámparas de sal que generan iones negativos, los cuales neutralizan el exceso de iones positivos que se encuentran en los espacios cerrados, debido a la gran cantidad de aparatos eléctricos. Lo que dice la literatura sobre este tipo de dispositivos, es que un entorno exterior natural y limpio, existe prácticamente la misma proporción de iones negativos y positivos, mientras que en espacios cerrados casi no hay iones negativos. La carga positiva del aire atrae y mantiene en suspensión partículas de polvo que pueden causar fatiga, dolor de cabeza, alergia e irritación de los ojos y mucosas.

Las lámparas de sal del Himalaya se proponen como una opción más sana: ionizadores naturales.

En muchos casos, es difícil decir si “funcionan” o no (a menos que pudiéramos acceder a una “medición” de iones, o a un registro de las frecuencias reinantes en el ambiente). Pero la experiencia personal puede dar una aproximación.

En mi caso, he probado tanto lámparas de sal como un ionizador eléctrico. En ambos casos, pude notar una sutil influencia en el ambiente, pero no creo que sean útiles en caso de una sobrepolución electromagnética. Asimismo, tampoco creo que haya unanimidad de opiniones al respecto.


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