Blanqueo de dientes casero


Bicarbonato mezclado con limón forma un interesante reemplazo de la pasta de dientes. Hojas de salvia y pulpa de fresa son otra alternativa casera para mejorar el aspecto de tu dentadura.

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Por Juan Esteban Jorge
Fuente: innatia.com

A veces, para combatir algún malestar del cuerpo o algo que nos desagrada de él, tenemos la solución al alcance de la mano y de una forma muy sencilla, aunque no lo sepamos. El blanqueo de los dientes entra dentro de este grupo. Es que, con algo que suele haber en todos los hogares, como lo es el bicarbonato de sodio, podemos ayudar en ese cometido.

Simplemente tienes que cepillarte los dientes después de cada comida empleando un poco de bicarbonato mezclado con zumo de limón, formando así un interesante reemplazo de la pasta de dientes común y corriente. Pero, de todos modos, ten precaución, ya que cualquier sustancia que produzca fricción constante en los dientes puede dañar su esmalte. Entonces aplica esta solución de vez en cuando y verás como mejora el aspecto de tu dentadura.

Otro de los remedios caseros para blanquear los dientes consiste en cepillarse con una infusión de hojas de salvia. También este preparado sirve para hacer gárgaras que curan heridas internas de la boca.

Algunos señalan que para blanquear los dientes, la pulpa de fresa va muy bien y puede colaborar en ese cometido. Pero fundamentalmente, intenta reducir aquellos factores que tienden a manchar la dentadura. El cigarrillo y el café, por ejemplo.

La Higiene y la Perfumeria en la Historia, han tenido curiosas prácticas, como la de los romanos, que se lavaban los dientes con orines. Sin caer en tales excentricidades, entre las propiedades del té según la Medicina Tradicional China, se destaca su contribución al fortalecimiento de los dientes, aunque su uso no asegure la blancura de los mismos. Algo que si promete el uso habitual de la pasta de dientes con Miswak o Siwak, elaborada en la India, y conocida en Asia, desde épocas remotas, para conservar la salud bucal.


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