“Las tres lecciones de un padre”: Pavel Durov
Pavel Durov, fundador de la aplicación Telegram, escribió este sencillo homenaje a la sabiduría de su padre. Habiendo cumplido 80 años, le transmitió a su hijo tres consejos de aplicación universal para la vida.
Hace un mes, mi padre, un destacado experto en literatura romana antigua, cumplió 80 años. Le pregunté qué consejo debía transmitir a la siguiente generación. Me dio tres:
1. Predica con el ejemplo. Las personas, especialmente los niños, siguen lo que haces, no lo que dices. Ver a mi padre trabajar incansablemente en numerosos libros y artículos científicos nos enseñó a mi hermano y a mí el significado de la dedicación y nos inspiró a trabajar duro también.
2. Céntrate en lo positivo. Al crecer en el Leningrado de la posguerra, mi padre aprendió a controlar sus emociones para ser una fuerza positiva para su familia, sus colegas y la sociedad. Me enseñó a enmarcar los pensamientos de manera que aporten el mayor bien posible, incluso en tiempos difíciles.
3. Da prioridad a la conciencia. Al estudiar y traducir a pensadores desde Julio César hasta Séneca, mi padre se dio cuenta de que la moral perdura más que el talento. La brújula moral, a diferencia de la inteligencia o la creatividad, es la cualidad humana definitiva que no perderá su valor ni siquiera en la era de la inteligencia artificial.